Si el conflicto entre Rusia y Ucrania persiste, la crisis mundial en la cadena de suministro de chips semiconductores podría agravarse aún más, ya que ambos países proveen gran parte del neón y del paladio, vitales para su producción, advierte Moody’s Analytics en un informe al que han tenido acceso el diario indio Business Standard.
En particular, Ucrania produce el 70 % del suministro global del neón, elemento crítico para los láseres usados en la fabricación de microchips, mientras que más del 40 % del paladio, empleado en sensores, entre otros usos, llega desde Rusia.
"Durante el conflicto de 2014-2015 en Ucrania, los precios del neón subieron varias veces, lo que indica lo grave que puede ser para la industria de los semiconductores: las empresas de exposición de semiconductores representan el 70% de la demanda total de neón, ya que representa una parte integral del proceso litográfico para fabricar chips", señaló el autor del artículo, analista Tim Uy, subrayando que los países europeos podrían estar entre los más golpeados.
De no alcanzarse un acuerdo que ponga fin a los enfrentamientos en los próximos meses, Moody’s Analytics augura un empeoramiento de la carencia mundial de chips. "Esto significa que se avecinan riesgos importantes para muchos fabricantes de coches, de dispositivos electrónicos, celulares y muchos otros sectores que dependen cada vez más de los chips para el funcionamiento de sus productos", advierten desde el gigante de servicios financieros.
Tras el inicio del operativo militar de Moscú en Ucrania los principales fabricantes de chips a nivel mundial comenzaron a suspender sus ventas a Rusia en el marco de las sanciones impuestas por Occidente.
- La crisis global de chips quedó de manifiesto durante la pandemia del coronavirus, luego de que las restricciones impuestas, así como el trabajo a distancia aceleraron la apuesta por la digitalización.